Luisina Giovannini, la promesa del tenis femenino
La joven moldense Luisina Giovannini es una de las grandes promesas del tenis femenino argentino. En 2018 fue la mejor Sub12 del país. Ahora, con apenas 14 años buscará sumar sus primeros puntos para integrar el ranking mundial.
Con el apoyo de su familia y el sueño de convertirse en una jugadora top ten del circuito profesional, Luisina Giovannini se fue a vivir a Rosario con el objetivo de mejorar su preparación y tener más oportunidades para competir.
Con esa premisa se radicó hace tres años junto a sus padres en Rosario y empezó a construir su carrera profesional en el French Clay Tenis, de la mano de otro moldense como su entrenador, Saúl Erlicher, quien tiene más de 30 años de trayectoria en el tenis europeo.
La joven tenista ya demostró todo su talento con la raqueta en el circuito profesional, donde rápidamente se consolido en Sub12 como la número uno en menores en 2018. Luego, continuó manteniendo su liderazgo en el país como Sub13 y comenzó a participar en competencias internacionales.
“Con 14 años recién cumplidos Luisina es técnicamente la jugadora más completa de Argentina. Tiene un gran talento, sabe jugar al tenis con todos los golpes cuasi a la perfección. Sabe volear, ir a la red…es muy completa. Hay una gran esperanza puesta en ella. Además, su enorme talento hace que se adapte muy rápidamente a cualquier superficie”, expresó Saúl Erlicher en diálogo con Canchita Chica.
Tras haber sumado distintas experiencias en Argentina y en el exterior como Sub14, a partir de este año los profesionales que entrenan a Luisina consideraron que ya estaba preparada para dar otro salto en su carrera y fue así que empezó a competir en adultos. Recientemente viene de competir en Córdoba y en Villa María, en el marco del circuito Latinoamericano.
La joven moldense es una de las grandes promesas del tenis femenino de nuestro país y ya cuenta con sponsor que apuesta a su futuro como profesional. En los próximos meses (si la pandemia lo permite) iniciará una gira por Francia en donde participará de diferentes torneos. Ante las pocas posibilidades de competencias de alto nivel en Argentina debe viajar al exterior para perfeccionarse y tener más experiencia profesional.
“Para este año el objetivo es que pueda competir en los seis torneos internacionales permitidos para las chicas de su edad y que logre obtener sus primeros puntos para empezar a integrar el ranking mundial”, manifestó el director el proyecto deportivo Saúl Erlicher.
Del patín a la raqueta
Luisina dio sus primeros pasos con la raqueta en Coronel Moldes casi por casualidad. “Empecé con patín y justo ahí al lado del salón había unas canchas de tenis, entonces le pregunté a mí mama si podía ir, y ella me dijo que sí. Fuimos, probé y me gustó”, contó la joven tenista.
Con el paso de los días empezó a jugar cada vez más, entrenarse y cuando estuvo preparada arrancó a competir contra chicas más grandes.
La joven que ahora viaja por Europa para sumar experiencia internacional y forjar su carrera profesional manifestó que se identifica con Roger Federer. “Mi revés es muy natural y tengo un juego parecido al de él”, expresó Luisina.
Apasionada por este deporte, la tenista dijo que jugando se divierte mucho y confesó que los viajes a los lugares donde compiten le permiten compartir buenos momentos con sus padres, los profes y sus compañeras.
Rosario siempre estuvo cerca
Con la convicción de fortalecer el creciendo de su hija como tenista y acompañarla en hacer realidad el sueño de ser jugadora profesional, los padres de Luisina dejaron su Moldes natal y se mudaron a Rosario, en donde ya estaba radicado Saúl Erlicher, otro moldense que armó su academia de tenis en los pagos de Nadia Podoroska.
“Cuando nos vinimos, hace ya 3 años, lo hicimos de un día para el otro porque mí profe también es de Moldes y está viviendo acá en Rosario. Por eso decidimos venir acá para entrenar juntos”, contó la tenista.
La jugadora sostuvo que estando en Rosario extraña un poco a la familia y a los amigos, pero de a poco se va acostumbrando. “Cuando vuelvo a Moldes me siento bien porque allá hay más libertad, más independencia, en cambio acá vamos de la casa al club y del club a la casa”, manifestó.
Con tan solo 14 años Luisina va construyendo su carrera como tenista profesional y sabe que en ese transitar su familia es uno de los pilares fundamentales. “Mi familia es muy importante en mi carrera porque me ayudan y acompañan muchísimo a todos lados, a los torneos, cuando viajo a jugar a Francia. Ellos son muy importantes para mí y siempre hacen todo lo posible para que yo pueda hacer lo que me gusta: jugar al tenis”, valoró la joven.
En este sentido, Saúl Erlicher también destacó el apoyo incondicional de sus padres. “Edgardo y Estela la siguen a todos lodos, sin ellos no podríamos hacerlo. Tomaron la decisión de instalarse en Rosario para estar con Luisina y eso es muy valioso”, remarcó.
La esperanza moldense
Las tenistas que se destacan e nuestro país se topan con una cantidad de obstáculos al tratar de entrar en el circuito profesional, desde cuestiones económicas hasta la falta de competencias a nivel nacional, esto genera que la mayoría termine abandonando en el intento.
A diferencia de muchas chicas, Luisina Giovannini cuenta con un equipo profesional que la acompaña (Saúl Erlicher, Renzo Rovetto y Nelio Bazán), tiene un proyecto deportivo sólido y la familia que la acompaña a todos lados. Esas particularidades junto a su enorme talento y sus virtudes con la raqueta la transforman en la gran esperanza del tenis femenino argentino.
Luisina sabe que el camino es largo y por eso se prepara de la mejor manera para cumplir uno de sus sueños: llegar a ser top ten del mundo.