“Los Incas es un sentimiento, es una partecita mía”

Así lo expresó Catherin Reich, presidenta del club Los Incas de Achiras, quien desde hace dos años dirige la institución. Con mucho esfuerzo, trabajo y compromiso, la comisión directiva encabezada por Reich puso al club nuevamente de pie. En poco tiempo los directivos concretaron distintas obras y siguen con la puesta en valor de sus instalaciones.

Por Candelaria Vidart

El ser mujer nunca lo sintió como un freno para presidir una institución que históricamente ha sido dirigida por hombres. Catherin es una persona a la que le gustan los desafíos, lograr sus metas y trabajar de manera colectiva para que los chicos tengan más oportunidades de crecimiento y desarrollo en el pueblo.

“Es lo único que tenemos en el pueblo y lo usan todos, para una fiesta o para un deporte, lo que sea, entonces tenemos que tener el mejor club. Por eso siempre le pido a la gente que nos ayuden, que colaboren”, expresó Reich.

Los chicos de fútbol van punteros, y esto hace que haya mayor entusiasmo y motivación, tanto en los más pequeños como en el resto de la comunidad de la linda del sur cordobés.

Reich decidió ser dirigente y comprometerse con la institución no porque le guste el fútbol o el deporte, lo hizo con la convicción de tener la capacidad para armar un grupo de trabajo y levantar la institución. “Me gusta que los chicos tengan una oportunidad en el pueblo, que puedan hacer algo”, afirmó la presidenta.

La sede del club Los Incas de Achiras tiene 80 años, lo cual requiere de un cuidado constante. Por eso hace más de dos años se juntaron muchos de los que estaban interesados en el club con el propósito de poner el piso nuevo y llevar adelante la puesta en valor de las instalaciones. “Entre todos dijimos de hacer algo por el club, vamos a ponernos las pilas y vamos hacer las cosas bien hechas, como debe ser”, recordó la dirigente. Así, con mucho esfuerzo lograron arreglar el techo de la institución y próximamente colocarán el piso nuevo, acción que tenían pensado realizar el año pasado, pero por la pandemia tuvieron que cerrar el club.

En noviembre de 2020 la institución pudo volver abrir sus puertas y desde entonces continúan trabajando fuertemente. “Este año logré que el club sea una sola cosa, que todas las disciplinas tiren juntas, entonces ahora tenemos un solo grupo que es la comisión grande y todo el mundo apoya, arrancamos con ganas”, manifestó con alegría Catherin.

Con mucho esfuerzo y compromiso la comisión directiva va cumpliendo con sus objetivos. Ya terminaron la cancha de bochas, que es una de las mejores de la zona, arreglaron el techo de la sede, los baños, están realizando el bufet nuevo  y siguen por más. “Ahora vamos agrandar la cancha que ya tenemos el tejido, vamos a poner luces nuevas porque a veces los chicos tienen que jugar de noche, y por ahí para otros clubes no es tanto, pero para nosotros es muchísimo”, aseguró Reich.

El club está funcionando en su totalidad desde enero. Con lo poco que tienen van haciendo mejoras. En el club Los Incas todo es a pulmón, por eso el esfuerzo de los dirigentes y la gente que colabora es enorme. “Realmente le vamos poniendo muchas ganas, ninguno tiene un suelo, y a su vez todos tenemos trabajos, familia y es mucho sacrificio que le vamos poniendo, no somos un grupo grande que se dedica a esto, entonces se nos hace pesado, pero lo vamos a lograr”, expresó emocionada la presidenta.

Estas palabras de Catherin Reich demuestran que el club es un espacio familiar y de unidad, en el que detrás de todo hay un arduo trabajo para lograr el objetivo de tener un club en excelentes condiciones y abierto a la comunidad para que todo el pueblo pueda disfrutar de sus instalaciones.

Para Reich el club Los Incas es un sentimiento, forma parte de ella. Por eso, todas esas horas de trabajo, de esfuerzo compartido, tienen su recompensa cuando la gente se apropia de la institución y disfruta de sus instalaciones. “Ahora voy a la cancha y veo a los nenes que juegan al fútbol o a las chicas de patín y ves que están felices ahí, y una dice: realmente vale la pena el compromiso”, dijo Catherin.

Hoy lo siente como parte de su vida, y llena de entusiasmo para que el club quede como se merece la gente y el propio club. “Quiero que de una vez se hagan bien las cosas, esa es mi intención, que quede bien armadito, y ahora se están viendo los cambios, y por eso la gente nos ayuda, porque ven los cambios”, afirmó Reich en diálogo con Canchita Chica.